Rivales
de la NFC Oeste que, sorprendentemente, llegan con el mismo récord a este
enfrentamiento. Creo que nadie apostaba a que esto sucedería. De hecho, muchos
especialistas y el público en general ubicaban a Arizona como uno de los
contendientes por parte de la Conferencia Nacional. Sin embargo, por ahora, esa
expectativa está lejos de cumplirse. Por parte de San Francisco, la sorpresa es
mucho menor ya que es un equipo que se encuentra en plena reconstrucción y
estrenando staff de coacheo.
¿Cómo
es que han llegado a este resultado estos equipos? Arizona sencillamente no
encuentra su identidad a la ofensiva. Más que nada, se le podría atribuir esa
situación a Carson Palmer que parece no poder dejar atrás esa versión de nivel de juego que presentó en los playoffs de enero pasado. La ofensiva de Arizona
ha pasado de ser una de las más explosivas a ser una de las más erráticas.
David Johnson es el único jugador consistente hasta el momento (Larry
Fitzgerald también, pero depende de su QB, así que su esfuerzo se diluye con
los errores del pasador). También la secundaria ha resentido la partida de
jugadores como Jerraud Powers y Rashad Johnson. Con esto, Arizona ha dejado ir
los juegos en contra de Nueva Inglaterra, Buffalo y Los Angeles. Todos juegos
que en el papel eran totalmente ganables, incluso dos de ellos como local. Su
único triunfo es contra Tampa Bay y aunque fue contundente, este equipo no es
precisamente una referencia para reflejar un buen desempeño.
Por
su parte, San Francisco tuvo un sorprendente debut en el que derrotó 28 – 0 a
Los Angeles. Después de eso, las cosas han sido bastante diferentes para el
equipo dirigido por Chip Kelly siendo arrollado en Carolina y Seattle. En su
regreso al Levi’s Stadium en la semana 4, parecían que podían llevarse el
triunfo cuando comenzaron el juego 14 – 0 sobre Dallas, pero tras un castigo
defensivo y fallas en el desempeño de la ofensiva, esa oportunidad terminó
diluyéndose. Lo peor es que el equipo también perdió a NaVorro Bowman (LB), tal
vez el mejor jugador del equipo y uno de sus líderes indiscutibles. Los
cuestionamiento en la posición de QB con
Blaine Gabbert se han hecho más fuertes conforme pasan las semanas. La ofensiva
aérea está lejos de ser amenazante.
Drew Stanton será el quarterback de Arizona para este juego. |
El desemepeño inconsistente de Blaine Gabbert ha sido factor en el poco progreso mostrado por la ofensiva de San Francisco. |
Ofensivamente,
ya se vio que San Francisco puede mover el balón. Sin embargo, pareciera que no puede mantener el buen
desempeño durante todo el juego. La defensiva de Arizona también tendrá
oportunidad de reafirmar su confianza en este partido. Las limitaciones en el
grupo de receptores permitirán que sea un juego a modo para la secundaria y
aunque Carlos Hyde ha sido una amenaza en la ofensiva terrestre, difícilmente
podrá cargar enteramente con la ofensiva de San Francisco. Tal vez con Colin
Kaepernick, San Francisco tendría oportunidad en este juego, especialmente
después de cómo Buffalo tuvo éxito con Tyrod Taylor y LeSean McCoy (208 yardas,
3 Tds) en contra de la defensiva de Arizona. Pero creo que el cambio de QB
tardará algunas semanas más en darse.
Pronóstico:
Arizona 27 – San Francisco 13.
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