Súper Bowl XLVII - San Francisco vs. Baltimore

El final de la temporada es casi una realidad. Solo faltan cinco días para que el juego con el que cualquier jugador de football americano sueña, se lleve a cabo. La edición 47 de este gran juego será entre los San Francisco 49ers y los Baltimore Ravens. Un enfrentamiento que ocurrirá por primera vez en este escenario y que además, enfrentará a dos hermanos head coach por primera vez en la historia de la liga. Jim (San Francisco) y John Harbaugh (Baltimore) son las cabezas de los equipos que chocarán el próximo domingo.

Jim y John Harbaugh.

La historia de estos hermanos en el football ha seguido caminos distintos. John Harbaugh jugó como back defensivo en la Universidad de Miami en Ohio. Después de su etapa como jugador colegial tuvo el puesto de coach asistente en las universidades de Western Michigan (1984-1987), Morehead State (1988), Cincinnati (1989-1996) e Indiana (1997). Finalmente, en 1998 ascendió a la NFL donde fue contratado por Filadelfia para dirigir a los equipos especiales. Durante ocho años conservó este puesto. En 2007, aun en Filadelfia, Andy Reid lo nombró coach de backs defensivos y solo un año después fue contratado como Head Coach de Baltimore. Tras cinco temporadas dirigiendo a este equipo, Harbaugh posee un récord de 54-26. En cada temporada ha llevado a Baltimore a playoffs y ésta será su primera aparición en el Súper Bowl.

Jim Harbaugh hace alugnos años en la Universidad de Michigan.

Por su parte, Jim Harbaugh jugó en la Universidad de Michigan durante su carrera colegial. En su último año con los Wolverines fue nominado para el Trofeo Heisman terminando tercero en la votación. Más tarde sería seleccionado por Chicago en la primera ronda del draft de 1987. Jugó 14 temporadas en la NFL distribuidas entre cuatro equipos: Chicago (1987-1993), Indianápolis (1994-1997), Baltimore (1998) y San Diego (1999-2000). Con Indianápolis se quedó a un solo juego del Súper Bowl en la temporada de 1995. En 2002 se integraría por primera vez como coach en la NFL con Oakland, sería el encargado de entrenar a los quarterbacks. Para 2004, Jim volvería al football colegial convirtiéndose en el Head Coach de la Universidad de San Diego. Ganaría un par de campeonatos en la conferencia en la que esta universidad participa (2005-2006). En 2007, se convertiría en el Head Coach de la Universidad de Stanford. Su buen trabajo en el programa de esta universidad le abriría las puertas para poder dirigir un equipo de la NFL. En 2011, Jim sería nombrado Head Coach de San Francisco. Un año después de haber llegado a la NFL tiene a su equipo en el juego más importante de este deporte.

Los dos hermanos han tenido trayectorias destacadas en sus carreras pero es este domingo cuando podrán comenzar a definir su legado. ¿Quién ganará? La historia de estos hermanos ha acaparado parte de la atención de los medios. Pero, obviamente, hay muchos otros factores en juego que influirán en el resultado del partido y que a continuación iré desmenuzando. 

El pasó por los playoffs para ambos equipos ha sido distinto, a pesar de que solo hubo diferencia de una victoria en el récord de temporada: San Francisco (11-4-1) y Baltimore (10-6). San Francisco llegó como el equipo #2 de la Conferencia Nacional mientras que Baltimore calificó como el #4 de la Conferencia Americana. Esto último obligó a que Baltimore tuviera un juego adicional en la postemporada, lo cual ha sido relevante, pues el enfrentamiento contra Indianápolis le permitió “despertar” de su letargo ofensivo, ese que le había hecho perder cuatro de los últimos cinco juegos de temporada regular. Contra Denver y Nueva Inglaterra, Joe Flacco y compañía han lucido como una máquina bien aceitada y que una vez que entra en ritmo ya no para. En lo correspondiente a San Francisco, este equipo pasó sin problemas sobre Green Bay y después logró venir de atrás en Atlanta. El desempeño de Colin Kaepernick ha sido fundamental para que el equipo de la Bahía haya logrado llegar al Súper Bowl.

¿Cuándo fue la última vez que se enfrentaron estos equipos? Hace poco más de un año que se vieron las caras, fue en la semana 12 de la temporada de 2011. Baltimore se llevó la victoria en el M&T Bank Stadium con marcador de 16 – 6. En ese momento, Alex Smith era el quarterback titular y la ofensiva de San Francisco solo pudo generar 170 yardas mientras que Baltimore logró un total de 253. La defensiva de San Francisco y la ofensiva de Baltimore no han tenido cambios tan drásticos de personal desde aquel juego. Por otro lado, la ofensiva de San Francisco con Colin Kaepernick (QB), Randy Moss (WR) y LaMichael James (RB) presenta un frente totalmente distinto al de la temporada pasada. La defensiva de Baltimore perdió a Jarret Johnson (DE) y a Larderius Webb (CB) siendo sus bajas más sensibles. Además, Ray Lewis no jugó en aquel juego. Difícil tomar como parámetro el enfrentamiento de hace un año pero no hay que dejar pasar de largo que hay un precedente. 

Ray Rice en contra de la defensiva de San Francisco. Ya tuvo una primera prueba de lo que significa enfrentar a esta defensiva hace un año.

 Ofensiva de Baltimore vs. Defensiva de San Francisco

Pasando a lo que han hecho en los juegos de postemporada, Baltimore ha promediado 425 yardas por juego, 276 por la vía aérea y 149 por la vía terrestre, logrando un total de 12 touchdowns. Su desempeño ha sido sobresaliente, especialmente habiendo enfrentado a la mejor defensiva presionando al quarterback (Denver) y a la segunda mejor provocando entregas de balón (Nueva Inglaterra). 

Joe Flacco y sus receptores han tenido un buen desempeño en playoffs.

Como ya lo había comentado en otro post, Joe Flacco ha lucido como uno de los mejores quarterbacks de la liga, ha lanzado para 853 yardas, 8 touchdowns y solo ha sido capturado cuatro veces. Por supuesto, no lo ha hecho solo, cuenta con un excelente grupo de receptores encabezado por Torrey Smith y Anquan Boldin. San Francisco viene de enfrentar a dos de las mejores ofensivas aéreas de la liga, Green Bay y Atlanta. Contra estos equipo permitió 644 yardas, 5 touchdowns y les robó un par de pases. Estas cifras están lejos de ser los mejores números para una defensiva, pero San Francisco ha respondido en los momentos críticos. Después de lo acontecido con Julio Jones en el juego de Campeonato de la NFC, Dashon Goldson (FS) y Donte Whitner (SS) tendrán que ser muy cuidadosos con las trayectorias de Torrey Smith, que promedia 22 yardas por recepción en los playoffs. Los linebackers de San Francisco tendrán una tarde ocupada con Ray Rice (RB) y Dennis Pitta (TE). Rice solo tiene cuatro recepciones en los playoffs pero San Francisco no debe confiarse. 

Por carrera, San Francisco no ha sido exigido en los playoffs. Ni Green Bay ni Atlanta se caracterizaron por tener buen juego terrestre, así que esta defensiva no tuvo mayor problema para mantenerlos por debajo de las 100 yardas (92.5). Con Baltimore, Justin Smith, Patrick Willis y compañía tendrán un reto más complicado. Ray Rice (247 yardas) y Bernard Pierce (169 yardas) han conformado un binomio que combina elusividad, velocidad y fuerza. Jim Caldwell (Coordinador ofensivo) no dudará en alternarlos para tratar de desgastar a la defensiva de San Francisco. Hasta ahora, la unidad defensiva del equipo californiano solo ha permitido un touchdown por tierra en playoffs, aunque el promedio por carrera es de 4.7 yardas, una cifra considerable. 

Duelazo el que sostendrá la línea ofensiva de Baltimore contra los frontales y linebackers de San Francisco.

La batalla en las trincheras entre la línea ofensiva de Baltimore y la línea defensiva de San Francisco será de lo mejor. Ambas son muy físicas. Von Miller y compañía solo pudieron capturar a Flacco una vez en el juego divisional, así que Aldon Smith y Ahmad Brooks no lo tendrán fácil. Recientemente, San Francisco no pudo poner presión sobre Matt Ryan. Ante esta situación, todo apunta a que el perímetro californiano tendrá que dar un muy buen juego pues Flacco contará con suficiente tiempo para localizar a sus receptores. 

La defensiva de San Francisco deberá centrarse en sacar de sus rutas a los receptores de Baltimore, siendo agresivos en las primeras cinco yardas y evitando que tengan ganancia considerable después de atrapar el pase. Esto último es algo en lo que han sobresalido con su excelente tacleo. Baltimore no debe pasar por alto que esta defensiva solo ha permitido nueve pases de más de 40 yardas tomando en cuenta la temporada regular y playoffs. 

Muy parejo el duelo entre estas unidades. Baltimore tal vez pueda mover el balón con cierta facilidad, pero no será sencillo anotarle a San Francisco. Este duelo se definirá en el juego aéreo, así que si Baltimore desea imponerse a la defensiva, Joe Flacco tendrá que refrendar lo que dijo en pretemporada sobre que él mismo se consideraba el mejor quarterback de la liga.

Ofensiva de San Francisco vs. Defensiva de Baltimore

La sustitución de Alex Smith por Colin Kaepernick le ha resultado muy bien a Jim Harbaugh, especialmente en los playoffs. Kaepernick le ha dado una dimensión totalmente distinta a esta ofensiva. San Francisco ha promediado 476 yardas por juego, 236 por la vía terrestre y 240 por la vía aérea, y ha anotado 10 touchdowns. Lo más impresionante es que Kaepernick ha logrado adaptarse acorde a  la situación de cada juego y con ello ha podido explotar las debilidades específicas de las defensivas rivales. Contra Green Bay, Kaepernick explotó por tierra, contra Atlanta, lo hizo por aire. 

¿Podrá Coin Kaepernick ser el tercer QB que le da un título a San Francisco?

En la ofensiva aérea, Kaepernick cuenta con un grupo de receptores jóvenes encabezado por Michael Crabtree. Crabtree ha sido el principal blanco de Kaepernick en el transcurso de la postemporada  y acumula 15 recepciones. El segundo receptor se encuentra considerablemente atrás y es Vernon Davis con seis recepciones. Esta falta de diversificación en los pases de Kaepernick no pasará desapercibida por Baltimore y Crabtree tendrá más atención del perímetro. Eso no quiere decir que San Francisco esté maniatado por aire, si algo ha caracterizado a Kaepernick es su habilidad para ganar tiempo y encontrar receptores o ganar yardas por sí mismo. Será muy importante que en situaciones de presión, Kaepernick no olvide la presencia de Ed Reed pues de no ser preciso en sus pases, el hábil safety de Baltimore podría interceptarlo. Además, no deberá exponer ni a él mismo, cuando decida correr, ni a sus receptores, en trayectorias cruzadas, a golpes innecesarios de Bernard Pollard. Baltimore ha permitido 287 yardas por juego por la vía aérea y ha logrado cinco intercepciones por solo cuatro touchdowns. Resalta, más que nada, el que esta defensiva haya enfrentado y derrotado a dos de los mejores pasadores en la historia de la NFL (Peyton Manning y Tom Brady) en semana consecutivas.

Vernon Davis ha sido el segundo receptor más buscado por Colin Kaepernick en los playoffs.

Por carrera, San Francisco ha devorado yardas. Frank Gore (209 yardas), LaMichael James (55 yardas) y Colin Kaepernick (202 yardas) han sido los responsables de acarrear el balón en el transcurso de los playoffs. El impresionante promedio de este grupo de corredores es de 6.6 yardas por cada vez que tocan el balón. La defensiva terrestre de Baltimore ha permitido 128 yardas por juego en los playoffs, una cifra muy alta. Sin embargo, aún no le han anotado por esa vía y el promedio de yardas permitidas por acarreo es de 3.9. San Francisco será un reto totalmente distinto para la defensiva de Baltimore debido a la variedad de formaciones que tiene y a la habilidad atlética de su quarterback. La edad y, por tanto, la velocidad son una desventaja para Baltimore, así que tendrán que ser muy disciplinados en su plan de juego y mantener sus asignaciones de huecos, de lo contrario los corredores de San Francisco obtendrán grandes ganancias. El trabajo de los frontales de Baltimore tiene que ser impecable en este juego. Esta es la oportunidad de Haloti Ngata (DT) y de Terrell Suggs (LB) de confirmar que son parte del grupo de los mejores jugadores que ha tenido el honor de jugar en la NFL.

La batalla en el centro de las líneas será todo un espectáculo.

La línea ofensiva de San Francisco tiene como principal debilidad la protección de pase. Afortunadamente para este equipo, la movilidad de Kaepernick mitiga esa situación y en postemporada solo han permitido dos capturas (44 en temporada regular). Por carrera, su trabajo ha sido sobresaliente al contribuir para que sus corredores alcancen un promedio de 6.6 yardas por acarreo. Es en este punto donde tendrán que hacer sentir su presencia Haloti Ngata, Terrance Cody y Ma’ake Kemoatu, jalando dobles o triples bloqueos para así dejar despejado el camino para los linebackers. 

El duelo entre estas dos unidades se centrará en el juego terrestre. Si San Francisco logra establecer rápidamente su juego terrestre, la defensiva de Baltimore difícilmente podrá sostenerle el ritmo. La experiencia de ésta última será muy importante, especialmente en las jugadas de opción. 

¿Quién ganará?

Esta vez, por más que le he dado vueltas a las estadísticas y al desempeño de ambos equipos en la postemporada me es difícil definir quién tiene la ventaja. Más bien, lo que sucede es que no hay como tal una ventaja definitiva para alguno de estos equipos. A Baltimore, ofensivamente le ha salido muy bien lanzar el balón. A San Francisco correr. Defensivamente, pesé a su irregular desempeño en la temporada, Baltimore ha despachado a dos de los mejores quarterbacks en la historia de la NFL. Por su parte, San Francisco ha hecho lo suficiente para neutralizar a las ofensivas rivales cuando así lo ha requerido. 

¿Qué hay de los equipos especiales? Este es un punto que estaba pasando por alto. David Akers vs. Justin Tucker podría ser el duelo que incline la balanza. Akers no ha sido muy confiable recientemente, mientras que Tucker ha sido casi una garantía. Un gol de campo podría ser una diferencia importante en este juego. En cuanto a los regresos de patada, Jacoby Jones por (Baltimore) y Ted Ginn Jr (SF) son muy peligrosos en cada regreso.

Por tanto, ¿Será que un gol de campo defina al Campeón del Súper Bowl? Puede ser, pero creo que más que el gol de campo como tal, será una jugada defensiva la que cambiará el rumbo del juego. Interceptar dos veces a Tom Brady y a Peyton Manning no es cuestión de suerte sino de un plan defensivo bien ejecutado. Kaepernick solo ha sufrido una intercepción en los playoffs, pero bastará otra más para que Baltimore se quede con el Súper Bowl de este año. 

Pronóstico: Baltimore 24 – San Francisco 21.

¿Qué aprendimos en las Finales de Conferencia de la temporada 2012?

El penúltimo fin de semana de football es parte de la historia. La edición no. 47 del Súper Bowl tiene a sus dos protagonistas. Por primera vez en la historia, dos hermanos se enfrentarán en el partido de campeonato de la NFL, John y Jim Harbaugh. No fue fácil para ninguno de los dos, Nueva Inglaterra y, especialmente, Atlanta fueron rivales complicados que lograron ponerse adelante en la primera mitad de los juegos, pero gracias a los ajustes realizados por estos coaches, ya no hicieron daño en la segunda mitad de sus respectivos juegos. Entre los aspectos que nos deja esta semana están los siguientes:

Joe Flacco, ¿En camino a ser quarterback de élite?

• Joe Flacco sabía de lo que hablaba en agosto del año pasado. A inicios de aquel mes, Flacco declaraba que él se consideraba el mejor quarterback de la liga. De hecho,  el agente de Flacco, Joe Linta, también declaraba que su cliente merecía un contrato que lo reconociera como uno de los mejores cinco quarterbacks. Muchos pensaron que era una exageración que el quarterback de Baltimore dijera tales cosas. Ahora que Baltimore está en el Súper Bowl, lo declarado por Flacco no suena descabellado, mucho menos cuando su desempeño ha influido en que Peyton Manning y Tom Brady queden fuera de la contienda por el título. En tres juegos de playoffs, Flacco ha lanzado para 853 yardas, ocho touchdowns, un impresionante promedio de 9.2 yardas por intento y el mejor rating de esta etapa de la temporada, 114.7. ¿Esto garantiza nuevo contrato para Flacco? Muy probablemente. De ganar el Súper Bowl no habrá duda de esto.

• Matt Ryan cometió errores en el peor momento. El quarterback de Atlanta, que se había caracterizado por sus nervios de acero y su juego certero en la temporada, cometió un par de errores  (una intercepción y un fumble) que aunque no se tradujeron en puntos para San Francisco, hicieron que Atlanta perdiera la posibilidad de al menos poner 3 puntos más en el marcador. El fumble vino cuando Atlanta se encontraba en territorio de gol de campo y fue por desconcentración de Ryan al perder de vista el balón. Ese error será un fantasma que perseguirá a Ryan hasta que logre llegar al Súper Bowl.

• Bernard Pollard es un verdadero “mata patriotas”. El castigo físico hacia miembros del equipo de Nueva Inglaterra por parte del strong safety de Baltimore, se remonta a sus épocas como parte de la defensiva de Kansas City. Como miembro de la tribu, Pollard golpeó a Tom Brady en la pierna en un safety blitz. El golpe a Brady causó estragos en su rodilla y terminó perdiendo casi todo el 2008. En 2009, como miembro de Houston, Pollard también mandó al hospital a Wes Welker con desagarre de los ligamentos de la rodilla. En los playoffs del año pasado, Rob Gronkowski fue la víctima. Ahora le tocó a Stevan Ridley, quien se arriesgó a ir frente a frente contra Pollard y terminó desvaneciéndose y perdiendo el balón.

• Cualquier duda sobre el dinamismo que Colin Kaepernick impregna sobre la ofensiva de San Francisco ha sido disipada. Esta vez Kaepernick no pudo correr contra Atlanta pero no fue necesario, bastó con las jugadas aéreas con Vernon Davis, Randy Moss y Michael Crabtree para que este quarterback moviera el balón consistentemente. Baltimore tendrá que trabajar horas extras en estas dos semanas para poder idear un plan de juego que pueda contrarrestar a este quarterback.

• ¿Se le está acabando el combustible a Bill Belichick y Tom Brady? Han pasado ocho años desde que Nueva Inglaterra ganó su último Super Bowl. Claro, ha llegado a dos más en ese periodo pero en ambos sucumbió ante Eli Manning y compañía. Hasta cierto punto, Nueva Inglaterra luce estancado. Tom Brady cumplirá 36 años en 2013 y el ocaso de su carrera está cada vez más cerca. De hecho, el mismo Rob Ninkovich (DE) declaró recientemente  que la dinastía de Nueva Inglaterra había terminado hace tiempo, que el equipo es totalmente otro al que ganó esa denominación.

• Tres leyendas de la NFL, Ray Lewis (#18), Ed Reed (#88), por Baltimore, y Randy Moss (#65), por San Francisco, estarán disputando el Súper Bowl XLVII. Los tres están considerados dentro del grupo de los 100 mejores jugadores en la historia de la NFL (entre paréntesis el lugar que ocupan en ese ranking).

• Una de las situaciones más lamentables de que Atlanta no esté en el Súper Bowl es que Tony González (#45 del Top 100), el mejor ala cerrada en la historia de la liga, tal vez se retire sin haber sabido lo que es estar en el juego grande de la NFL. Es difícil concebir que una carrera tan exitosa como la de este jugador no incluya un anillo de por medio (Si, también pienso en Barry Sanders). Regrese o no para la temporada 2013, Gonzalez deja un importante legado como jugador.

Resultados de las Finales de Conferencia.

Poco faltó para que diera con el resultado de ambos juegos de las Finales de Conferencia. Sin embargo, San Francisco hizo un buen trabajo en la segunda mitad y evitó que Atlanta remontará como lo hizo con Seattle. Fue un buen juego, sumamente entretenido. Por otro lado, Baltimore mantuvo alejado a Tom Brady de las diagonales y Joe Flacco dio un muy buen juego, especialmente en la segunda mitad. El Súper Bowl será disputado por dos entrenadores que son hermanos. Sin duda, muy interesante escenario el que arrojaron las Finales de Conferencia.

San Francisco 28 – Atlanta 24

Atlanta tuvo un primer cuarto de ensueño en el que ofensivamente aprovechó todas sus oportunidades y defensivamente neutralizó completamente a San Francisco. Sin embargo, San Francisco despertó a partir del segundo cuarto y logró limitar el dominio de Atlanta. Fue gracias a las entregas de balón que el equipo visitante lograría tomar la ventaja en el último cuarto. Atlanta tuvo una última oportunidad en los minutos finales del juego pero ya en zona roja no podría convertir una cuarta oportunidad. San Francisco estará disputando el sexto Súper Bowl en la historia de la franquicia.

Dos excelentes jugadores que dieron todo en este juego.

Al inicio del juego, Atlanta solo requirió de siete jugadas para llegar a las diagonales en su primera serie, que concluyó con un pase de 46 yardas de Matt Ryan a Julio Jones (7-0). San Francisco solo avanzaba una yarda en su primera posesión y despejaba. En su segunda posesión, Atlanta volvía a mover bien el balón y lo desplazaba 65 yardas hasta la 17 de San Francisco. Matt Bryant patearía un gol de campo de 35 yardas para aumentar la ventaja de Atlanta (10-0). El equipo local no tardaría mucho tiempo en recuperar el balón pues San Francisco perdía yardas en su siguiente posesión y despejaba nuevamente. Cuatro jugadas le bastaban a Atlanta para volver a sumar puntos. La jugada de anotación sucedía al inicio del segundo cuarto. Matt Ryan conectaba un pase de 20 yardas con Julio Jones (17-0). El dominio de Atlanta parecía absoluto pero San Francisco al fin respondería en su primera serie del segundo cuarto. El equipo visitante lograba avanzar 80 yardas y capitalizaba la serie con una carrera de 15 yardas de LaMichael James (17-7). Atlanta era detenido inmediatamente en la siguiente serie lo que abría la oportunidad para que San Francisco se acercara más en el marcador. El equipo californiano no desaprovechaba y con pases a Vernon Davis lograba llegar a zona de goal. Ahí, Colin Kaepernick conectaba pase de 4 yardas con Davis (17-14). Con poco menos de dos minutos de juego, Matt Ryan echaba a andar a la ofensiva de Atlanta que consiguió avanzar 80 yardas y poner siete puntos más en el marcador con un pase de 10 yardas a Tony Gonzalez (24-14).

Para la segunda mitad, San Francisco iniciaba con una serie ofensiva exitosa en la que desplazaba el balón 82 yardas. Frank Gore concluía la serie con una carrera de cinco yardas a las diagonales (24-21). En la siguiente posesión, Matt Ryan era interceptado y parecía que San Francisco al menos empataría el juego. Sin embargo, David Akers fallaba un intento de gol de campo de 38 yardas. Atlanta comenzaba otra serie ofensiva que llevaría hasta territorio de San Francisco. Lamentablemente para el equipo local, estando en la yarda 28 del rival, Ryan perdía el balón y Aldon Smith recuperaba. Una serie que al menos hubiera redituado en tres puntos, concluía. Ya en el último cuarto, Frank Gore se escapaba 9 yardas a las diagonales y por primera vez, San Francisco tenía la ventaja (28-24). Atlanta tendría ocho minutos para tratar de darle la vuelta. La ofensiva local consiguió llegar hasta la yarda 10 del visitante pero no más, perdería el balón jugándosela en 4ª oportunidad. Más tarde, con unos pocos segundos en el reloj, Atlanta tendría oportunidad de una última jugada pero no sería suficiente para modificar el marcador. 

Frank Gore anotando el touchdown que le daba la ventaja a su equipo.

San Francisco no lució tan aplastante a la ofensiva como la semana pasada pero hizo lo necesario para salir adelante en el juego. En total, acumuló 373 yardas, casi 100 menos que Atlanta. Colin Kaepernick lanzó para 233 yardas y un touchdown. Esta vez la contribución de Kaepernick en el juego terrestre fue marginal y tuvo 21 yardas en el juego. Frank Gore fue el corredor más activo con 21 acarreos para 90 yardas y dos touchdowns. Por pase, Vernon Davis fue el más productivo con cinco recepciones para 106 yardas y un touchdown. La defensiva tuvo un juego complicado, su jugada más importante vino cuando Atlanta no pudo convertir en 4ª oportunidad al final del último cuarto.

Matt Ryan y compañía volvieron a aprovecharse de una de las mejores defensivas de la liga y terminaron produciendo 477 yardas. Durante la primera mitad, San Francisco no encontró la forma de detenerlos. Para la segunda, un par de errores que derivaron en entregas de balón provocaron que este equipo perdiera oportunidades de hacer puntos. Mat Ryan lanzó para 396 yardas, tres touchdowns y una intercepción. El juego terrestre apenas sumó 81 yardas. Julio Jones (182 yardas, 2 Tds), Roddy White (100 yardas) y Tony Gonzalez (78 yardas, Td) tuvieron un buen desempeño durante el juego. La defensiva de Atlanta, en general, hizo un trabajo aceptable pero no fue suficiente para mantener a San Francisco lejos de las diagonales. 

Baltimore 28 – Nueva Inglaterra 13

En la redición de la Final de Conferencia del año pasado, Baltimore logró que el final fuera diferente esta vez. Con una buena actuación de Joe Flacco y de su defensiva, Baltimore regresará al Súper Bowl después de 12 años.

Volveremos a ver al #52 de Baltimore en un Súper Bowl.

La primera mitad del juego se desarrolló lentamente. Los equipos tardaron en entrar en ritmo. Durante el primer cuarto, Nueva Inglaterra obtuvo la ventaja con un gol de campo de 31 yardas de Stephen Gostkowski (3-0). El marcador no se movió más durante el resto del periodo inicial. En la primera serie del segundo cuarto, Baltimore movía 90 yardas el balón, principalmente por pase. La serie concluía con una carrera de dos yardas de Ray Rice (7-3). Nueva Inglaterra respondía inmediatamente con una serie de 79 yardas. La jugada de anotación era un pase de una yarda de Tom Brady a Wes Welker (10-7). En su siguiente posesión, Nueva Inglaterra volvía a poner puntos con un gol de campo de 25 yardas por parte de Gostkowski (13-7) justo antes de concluir la primera mitad. 

La segunda mitad volvía a comenzar sin que ninguno de los equipos se mostrara consistente a la ofensiva. Fue hasta la segunda posesión que Joe Flacco comenzó a entrar en ritmo y lanzaría ocho pases para 62 yardas. La jugada de anotación fue un pase de cinco yardas de Flacco a Dennis Pitta. Nueva Inglaterra no conseguiría nada en el tercer cuarto. Al final de este periodo, Baltimore comenzaría una serie que se prolongaría hasta el inicio del último cuarto. El equipo visitante avanzaría 63 yardas y con un pase de dos yardas de Flacco a Anquan Boldin extendería su ventaja (21 – 13). En la siguiente serie ofensiva de Nueva Inglaterra, Bernard Pollard le zafa el balón a Stevan Ridley después de un golpazo frente a frente. Baltimore recuperaba la posesión y solo tardaría cuatro jugadas en anotar. Flacco volvía a conectar con Boldin, esta vez para 11 yardas y Baltimore se separaba considerablemente en el marcador (28-13). Tom Brady sería interceptado dos veces en el tiempo restante de juego y con eso, las posibilidades de Nueva Inglaterra de remontar se esfumarían. 

De élite o no, Joe Flacco ha conseguido llevar a su equipo a un Súper Bowl.

La ofensiva de Baltimore aprovechó las oportunidades que el perímetro de Nueva Inglaterra le dio para hacer yardas en pases de corto y mediano alcance. Joe Flacco lanzó para 240 yardas y tres touchdowns. Flacco distribuyó sus pases a siete diferentes receptores entre los que destacaron Torrey Smith (69 yardas), Anquan Boldin (60 yardas, 2 Tds) y Dennis Pitta (55 yardas, Td). Ray Rice (48 yardas) y Bernard Pierce (52 yardas) se repartieron los acarreos. La defensiva logró mantener alejado a Tom Brady de las diagonales y realizó dos intercepciones cruciales al final del juego, además de un balón suelto. Ray Lewis finalizó con 13 tacleadas.

Para Nueva Inglaterra, poco le valieron las más de 400 yardas (428) que avanzó durante el juego. Tom Brady lanzó para 320 yardas, un touchdown y dos intercepciones. El juego terrestre produjo 108 yardas pero no pudo ser factor. A la defensiva, Rob Ninkovich fue el más destacado con dos capturas.

Finales de Conferencia: Análisis de los juegos y pronósticos

Las jugadores a seguir en estas finales de confernecia.

La semana pasada estuvo más complicada de lo que imaginaba para predecir... suele pasar. Esta semana no parece ser distinta. En la Conferencia Nacional, San Francisco lució como una aplanadora frente a Green Bay pero ¿Podrá hacer lo mismo fuera de casa y en un domo?. Por otro lado, Atlanta viene de derrotar a un equipo con una estructura muy similar a la de San Francisco ¿ Podrá conseguir su segundo triunfo en playoffs en cinco años?. En la Conferencia Americana, Baltimore tiene una cuenta pendiente con Nueva Inglaterra cuando el año pasado dejó escapar el triunfo en una jugada y el empate en la siguiente. Ambos equipos con ofensivas muy afinadas. La pregunta aquí será ¿Qué defensiva logrará prevalecer?. Veamos la inforamción al respecto.

San Francisco (12-4-1) v. Atlanta (14-3)

Los dos equipos con mejor récord de la Conferencia Nacional serán los que estarán disputando el Campeonato de la misma. De San Francisco no es sorpresa, el año pasado ya había mostrado la gran capacidad que tiene como equipo y repite como finalista, solo que esta vez será visitante. De Atlanta, muchos no esperábamos verlo tan lejos y no es que no contara con el talento y dirección suficiente para lograrlo, sino que el equipo había tenido muchos problemas en playoffs en años anteriores. Basta con recordar lo hecho el año pasado por Atlanta en playoffs, cuando solo anotó dos puntos en el único juego que disputó. Sin embargo, ahora sus situación es distinta y estará acompañado por su público.

Los dos mejores equipos de la NFC chocarán este fin de semana.

Será la primera vez que estos equipos se enfrenten en esta temporada. Durante la temporada tuvieron tres rivales en común: Arizona, NY Giants y Nuevo Orleans. El récord de ambos fue de 3-1 contra estos equipos. Atlanta perdió con Nuevo Orleans y San Francisco contra NY Giants. 

La actuación ofensiva de San Francisco en ronda divisional fue espectacular. Colin Kaepernick despedazó a la defensiva de Green Bay, que nunca pudo encontrar la manera de detenerlo. El juego terrestre lució más explosivo que en ningún otro juego y acumuló 323 yardas. Cada vez que un corredor de San Francisco tocaba el balón había casi 8 yardas aseguradas (7.5) para el equipo. Esos son datos que deben preocupar a Atlanta pues finalizó como la defensiva #21 contra la carrera permitiendo 123 yardas por juego, 16 touchdowns (#25) y tuvo el cuarto promedio de yardas más alto por acarreo (4.8). A pesar de las estadísticas, Atlanta derrotó a Seattle que tiene una estructura ofensiva similar a la de San Francisco basada en un sólido ataque terrestre con un quarterback móvil. Un dato interesante es que todas las derrotas de San Francisco en el año fueron contra equipos que manejan formación 4-3 (San Luis, Seattle, NYG y Minnesota). No le es tan sencillo jugar contra formaciones de este tipo. Sean Witherspoon (LB) y Stephen Nicholas (LB) tendrán una tarde muy ocupada evitando las carreras por fuera del tacle y cuidando las jugadas de opción. Jonathan Babineaux (DT) y Peria Jerry (DT) serán los responsables del centro. Por pase, el duelo luce más balanceado. Atlanta cuenta con un perímetro experimentado y muy veloz. Su atención se concentrará en los movimientos de Michael Crabtree,  quien al fin está respondiendo acorde a las expectativas que se tenían de él cuando fue seleccionado en la primera ronda de 2009. No obstante, no es el único receptor capaz de San Francisco, recordemos que está Randy Moss y que hay dos alas cerradas de excelente nivel, Delanie Walker y Vernon Davis. Si John Abraham está listo será de gran ayuda para que Atlanta pueda presionar a Kaepernick. 

Matt Ryan enfrentará a una de las mejores defensivas de la liga.

La ofensiva de Atlanta viene de superar una de las pruebas más difíciles en esta temporada, enfrentar a la defensiva de Seattle. Matt Ryan y compañía lograron moverle el balón 417 yardas y anotarle 30 puntos a la cuarta mejor defensiva en yardas (306 yardas por juego) y a la mejor en puntos (15.3). Semana tras semana, Atlanta ha demostrado que su arsenal aéreo es peligroso para cualquier equipo. Julio Jones, Roddy White y Tony Gonzalez siempre están listos para hacer jugadas grandes. No será fácil para el perímetro de San Francisco cubrir a este grupo de receptores. Sin embargo, este perímetro ya cuenta con vasta experiencia enfrentando a excelentes grupos de receptores. De hecho, viene de derrotar a un equipo cuya principal fortaleza es el juego aéreo. La principal diferencia para este juego será que Atlanta cuenta con una línea ofensiva mucho más sólida que Green Bay. Matt Ryan fue capturado 28 veces, la octava menor cifra en este año. Para San Francisco será indispensable poner presión sobre Ryan y evitar que lance con comodidad. En el juego terrestre, San Francisco no debe tener problema para frenar a la que terminó como la cuarta peor ofensiva por carrera, aunque tampoco debe confiarse porque con todo y el mal desempeño en la temporada, Atlanta le corrió 167 yardas a Seattle. 

Como local, Atlanta solo ha perdido un partido en esta temporada. San Francisco tendrá su primer juego como visitante en playoffs desde 2003 (Tampa Bay). Este equipo no gana fuera de casa en playoffs desde 1989 cuando Joe Montana aún era el quarterback. Adicionalmente, hay una tendencia que mostró San Francisco en esta temporada, ganaba dos juegos y perdía el tercero, sin falla. San Francisco lleva dos triunfos y corresponde al juego en Atlanta ser el tercero ¿Qué pasará? San Francisco es muy buen equipo y tal vez la tendencia mostrada en temporada regular no signifique nada. Sin embargo, se enfrentará a un entorno hostil y muy diferente al que usualmente está acostumbrado (domo, pasto sintético). Atlanta no será rival sencillo, mucho menos con los nervios de acero que posee Matt Ryan. Si San Francisco desea ganar tiene que presionar a Ryan. Por otro lado, si Atlanta desea ganara necesita correr como lo hizo con Seattle. Los equipos que le han ganado a San Francisco lo han hecho corriendo. Será un juego cerrado. Pronóstico: Atlanta 27 – San Francisco 24.

Baltimore (12-6) vs. Nueva Inglaterra (13-4)

Dos de los jugadores más importantes en la liga en lo que va del siglo se verán las caras por última vez en el  campo de juego. El enfrentamiento de despedida entre Ray Lewis y Tom Brady no podría tener otro escenario más dramático que la Final de la Conferencia Americana. Por segundo año consecutivo se encontraran en esa instancia. El año pasado, Nueva Inglaterra apenas consiguió salir con la victoria gracias a una excelente jugada defensiva de Sterling Moore que le zafó el balón a Lee Evans en las diagonales, antes de que pudiera ser considerado recepción, y a un gol de campo  fallado por Billy Cundiff que hubiera enviado el juego a tiempo extra. 

Segundo enfrentamiento para estos equipos en la temporada. Una oportunidad más para limar asperezas.

En la semana 3, estos equipos se enfrentaron por primera vez en esta temporada. El juego fue en Baltimore y fue el equipo local el que logró prevalecer con un gol de campo de 27 yardas de Justin Tucker cuando el reloj expiraba. Nueva Inglaterra finalizó con 396 yardas, Tom Brady contribuyó con 335 y un touchdown. Baltimore tuvo uno de sus mejores juegos ofensivos y sumó 503 yardas. Joe Flacco lanzó para 381 yardas, tres touchdowns y una intercepción.

La ofensiva de Baltimore ha jugado muy bien en los dos juegos de playoffs en los que ha participado. Baltimore ha promediado 459 yardas en estos partidos. Joe Flacco ha acumulado 613 yardas y cinco touchdowns, sobresale que no ha sido interceptado y que su promedio por intento es de 10.8 yardas. Esto podría ser preocupante para Nueva Inglaterra que defensivamente depende mucho de forzar entregas de balón. Además, la defensiva del equipo de Foxborough terminó como la tercera peor en yardas por pase en la temporada (271 yardas por juego). En el juego de temporada regular, el perímetro no pudo con Torrey Smith que en solo seis recepciones, dos de ellas para touchdown, les avanzó 127 yardas. En ese momento Nueva Inglaterra aún no contaba con Aqib Talib (CB) que ha sido una importante adición desde que llegó en noviembre procedente de Tampa Bay. Talib seguramente estará encargado de la cobertura sobre Smith, tendrá que contrarrestar la velocidad de Smith siendo físico o de lo contrario tendrá una larga tarde. Smith no será el único hombre al que Nueva Inglaterra tendrá que poner atención. Dennis Pitta (TE) representará un reto complicado para Dont’a Hightower (LB) y Jerod Mayo (LB). Jacoby Jones y Anquan Boldin serán buscados recurrentemente por Flacco y son especialistas en ganar yardas después de atrapar el balón. Además de todos estos excelentes jugadores, Nueva Inglaterra no puede olvidarse de Ray Rice, quién lleva 199 yardas en los playoffs. Rice no estará solo, alternará con Bernard Pierce. Son bastantes las armas con las que cuenta Baltimore a la ofensiva y lo que los vuelve más peligrosos, es que Jim Caldwell (CO) los ha aprovechado a todos. Nueva Inglaterra cuenta con buenos elementos a la defensiva pero dista de ser una defensiva dominante. El mejor presionando al quarterback es Rob Ninkovich, pero difícilmente podrá acercársele a Joe Flacco, especialmente si Rice tiene éxito en el juego terrestre.

Última vez que veremos a estos dos gigantes compartir el campo de juego.

A la ofensiva es donde Nueva Inglaterra se encuentra mejor plantado. El nombre de Tom Brady ya dice mucho al respecto. Tan solo en el juego contra Houston, Brady lanzó para 344 yardas y tres touchdowns. La defensiva de Baltimore tendrá una tarde ocupada descifrando a este quarterback. Sin embargo, cuenta con el talento para hacerlo. A diferencia del juego de la semana 3, Baltimore no contara con su mejor cornerback, Lardarius Webb, pero Corey Graham ha hecho un buen trabajo supliéndolo y recientemente interceptó en dos ocasiones a Peyton Manning. La baja de Ron Gronkowski es sensible para la ofensiva de Nueva Inglaterra cuyas formaciones suelen requerir de dos alas cerradas. Aaron Hernandez y Wes Welker comandarán la ofensiva aérea. La experiencia de Ed Reed será clave para limitar el daño que estos puedan hacer. El juego terrestre de Nueva Inglaterra ha tenido éxito la mayor parte de la temporada así que Haloti Ngata y Ray Lewis estarán ocupados con Stevan Ridley y Shane Veneer. Ambos corredores fueron claves en el triunfo contra Houston y se combinaron para cuatro touchdowns. Terrell Suggs y Paul Kruger tendrán la difícil tarea de presionar a Tom Brady pues su línea ofensiva lo protege muy bien y solo permitió 27 capturas en la temporada, una en el juego contra Houston. 

Todo apunta a que será un juego ofensivo en el que aquella defensiva que logre provocar un error en el rival será la que incline la balanza a favor de su equipo. El hecho de que Nueva Inglaterra sea local no debe afectar a Baltimore. Ya el año pasado estuvo muy cerca de sacarle el juego en Foxborough. El liderazgo y motivación con el que ha jugado Ray Lewis en estos playoffs es uno de los motores de Baltimore. Además, hay un aspecto adicional donde Baltmore luce más sólido y es en equipos especiales con Jacoby Jones como regresador (Nueva Inglaterra tuvo problemas en los regresos con Houston) y Justin Tucker como pateador. Pronóstico: Baltimore 35 – Nueva Inglaterra 31.